Translate - Traductor

domingo, 1 de junio de 2014

La vida es una rueda...

A veces la vida grita.
La vida es una rueda que gira y gira sin parar… en cada vuelta hay una situación o circunstancia especial que está ahí para verla, saborearla, olerla y tocarla… pero sobre todo para escucharla… Sí, escuchar lo que esa situación nos quiere decir y más aún cuando las situaciones son repetitivas, a veces la vida GRITA para que no sigamos haciéndonos los sordos y la escuchemos.
No vale estar ciegos o cerrar los ojos para no ver las cosas que hay que ver,  aunque por protección hacia uno mismo, elijamos enceguecer.
Podremos sentir en nuestra vida el “sabor” que queramos, nadie más que uno mismo nos llevamos el alimento a la boca y lo saboreamos placenteramente como algo que ya es cotidiano.
El “aroma” de nuestra  vida  puede ser tan sutil y placentero como decidamos que sea si esa es nuestra verdadera opción y nos consideramos merecedores de ella.
La “textura” de nuestra vida la construimos día a día… Puede ser suave y tersa como la piel de un bebé o áspera y dura como una roca porque es como lo construimos en cada vuelta que damos en nuestra vida.
“Escuchemos” conscientemente lo que la vida te dice con cada encuentro agradable o lleno de tensión, en cada evento hermoso, debemos escuchar la sabiduría que hay en cada uno de esos encuentros y aprender de ellos.
Cada vuelta que nos da la vida, es un ciclo de  aprendizaje que nos ayuda a ser cada día mejores internamente… sabremos que hemos aprendido, solo si logramos sentirnos en paz con nosotros mismos, cerrando ciclos, reconciliándonos con los amores y desamores, perdonando y perdonándonos, porque en definitiva nuestra vida se edifica de éxitos sin fracasos cuando aprendemos de ellos…
Puede que la vida en su girar nos haga dar muchas vueltas, lo que no debemos permitir es girar sobre nuestro propio eje, si nos anclamos no podemos avanzar, no evolucionamos, no crecemos y nos deshumanizamos para convertir el acto de la vida en un proceso mecánico y sin sentido.
Solo agradece que te sucedió y ese evento te enseño… Si se trata de una persona que ya no está y eso te llena de nostalgia, agradécele por haber cumplido su misión  de tocar tu vida y recordarte qué tan humano eres… No permitas que un pasado sin futuro arruine tu presente… tu vida.
Por último, ámate porque nadie puede dar lo que no tiene para sí mismo.

A veces la vida grita.

IMAGEN: NERI SÁNCHEZ

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Mil Gracias por su visita en SER+POSITIVO y por dejar su comentario. Esperamos seguir disfrutando de sus visitas.
Un abrazo de luz y muchas bendiciones.
Namasté