Translate - Traductor

sábado, 24 de febrero de 2018

Se nos fue LAIKA... Vuela Alto mi Chula... (a un mes de tu partida)

SER+POSITIVO


El miércoles 24 de enero fue un día muy triste pues falleció la querida Laika, un angelito peludito de cuatro patitas que tenía casi 14 años con mi nieto Luis Manuel, mi hija Vanessa  y su mamá Gretty.

Laika Chulina Torres Hernández (su nombre de pila completo) era una Poddle Toy blanca de ojitos negros y redondos como unas canicas, muy inteligente (entendida) afectuosa, muy consentida y sin ninguna duda formaba parte muy importante en esta familia. Yo la quería mucho, pues aunque no estuve todos esos años con ella por estar en Caracas y ellos en Barinas, sabía lo que ella representaba para esta familia y muy especialmente para mi nieto Luis Manuel, quién siempre me hacía saber de ella por fotos y por las anécdotas que me comentaba telefónicamente. Desde el año 2014 cuando me vine de Ccs. comencé a tener más contacto con ella y desde Mayo del año pasado (2017) cuando regresé de Santo Domingo para residenciarme en Barinas esa interacción se hizo más estrecha y afectuosa, al punto de llegar a considerar a Laika como mi compañera y confidente y parece que era algo recíproco pues ella me buscaba y le agradaba dormir en el cuarto donde estoy durmiendo.


Era conmovedor ver a Laika cuando Gretty y Vanessa salían a trabajar como ella se quedaba un largo rato sentadita en posición de alerta en la puerta principal hasta que pasado un tiempo prudencial, que ella sola decidía, se venía a dónde yo estuviese. También era impresionante como ella sabía cuándo venían ya de regreso y la manera cariñosa y efusiva como las recibía como si hubiese dejado de verlas por muchos días, saltaba de alegría, daba vuelticas e incluso reclamaba con ladridos por los esperados “bocaditos” y detalles que sobre todo Gretty acostumbraba obsequiarle para consentirla y que hacían muy feliz a Laika. Cuando yo estuve trabajando en Barinas de noche, al llegar en la mañana también salía a recibirme, de manera menos efusiva, pero siempre alegre y olfateando mis zapatos y mis pantalones para saber de dónde venía, luego me acompañaba a la habitación para ver que le había traído pues me acostumbré a llevarle algo de mi cena para también demostrarle mi cariño hacia ella, y ella así lo comprendió rápidamente, naciendo una camaradería entre ambos.


Cuando estaban en casa Vanessa y Gretty ella las privilegiaba a su lado sobre cualquiera y las acompañaba de manera incondicional pero ante cualquier desavenencia o altercado entre ellas (Gretty y Vanessa) Laika de inmediato se venía al cuarto, e incluso rasguñaba la puerta si estaba cerrada y se refugiaba a mi lado mirándome, quizás buscando protección o tal vez como avisando que algo “andaba mal” para que yo interviniera… También sucedía a la inversa, cuando estando plácidamente echadita conmigo en la habitación, si sentía algún movimiento afuera, en la cocina o en otro lugar, se incorporaba y trataba de abrir la puerta con su patita delantera y de no lograrlo me miraba como solicitando que le abriera, al yo preguntarle si quería salir dirigía su mirada hacia mí y luego a la puerta indicando que eso era lo que deseaba y al abrirle salía rápidamente. De igual manera era muy graciosa su manera de entrar a la habitación, cuando ella así lo disponía, abría la puerta con fuerza y entraba con gran sentido de pertenencia y autoridad, en una mezcla de una “hembra Alfa de la manada” y una abuelita que no encuentra que hacer en la casa… jejeje!!! Así era Laikita, quien a pesar de su avanzada edad de 14 años, solía caminar con la prestancia de un “caballito de paso” y correr ágilmente como una cachorrita cuando estaba alegre, al llegar alguien muy querido o después de comer e incluso después de hacer sus necesidades (siempre en el mismo lugar determinado para ello) solía correr por toda la casa y revolcarse de una manera muy particular en el piso con lo cual parecía querer decir que “había ido al baño”… 

Cuando dejé de trabajar y nos quedábamos los dos solos gran parte del día, almorzábamos juntos y aprendí a conocerle sus gustos y preferencias, su pasión por las frituras y su desapego a los granos y a la comida fría. Era muy buena vegetariana y podía comer cualquier tipo de fruta y verduras con una especial predilección por el cambur y el mango. Si se trataba de pan era mejor mojárselo con café para así hacerlo más fácil de masticar por la falta de algunas piezas dentales producto de su edad y a la vez más agradable a su gusto de niña consentida. 

En diciembre cuando se escuchaban los fuegos artificiales, los cuales no eran de su agrado como sucede con la mayoría de los peluditos, ella buscaba protección en la habitación dónde duermo y allí se quedaba sentada (no echada) en posición de alerta mirando hacia la puerta con cierto apremio y nerviosismo.


No obstante su diminuto tamaño era una Gran guardiana y en las noches realizaba una excelente labor de vigilancia y alerta ante cualquier ruido o situación extraña; yo aprendí a identificar sus ladridos, el cual modificaba de acuerdo a la situación: un ladrido estridente ante las peleas de gatos callejeros en el porche de la casa, lo cual la enardecía, a diferencia con los tres mininos (Tiburcio, Mika, Filomena) que viven aquí con ella y con los cuales tenía una relación afectuosa y muy respetuosa, como verdaderos hermanitos; tenía otro ladrido particular, mucho más suave y con pausa para “delatar” a la gata del vecino (la intrusa e intensa Anís) y al sentir que yo salía hacía el amague de perseguirla pero sin mayores consecuencias… También podía ladrar para simplemente llamar mi atención y así lograr que abriera la puerta del cuarto para entrar… Ay mi Laikita como te voy a extrañar mi viejita querida…


Es muy triste ver como una vida se desvanece en un momento, sin más ni más, así de simple… Yo la vi decaer y morir en cuestión de poco más de una semana, primero al evidenciar en las noches como redujo su actividad de vigilancia y aumentaba su postración y somnolencia; también pude darme cuenta de la gran cantidad de garrapatas que tenía y como mientras ella dormía pululaban por todo su pelaje y por todo el mueble donde dormía, era realmente impresionante; incluso le tomé unas fotos como evidencia de lo que estaba viendo… Le informé a mi hija Vanessa de la situación pero ante su respuesta airada y tajante de que Laika estaba bien y que no tenía garrapatas decidí no volver a tocar el tema. Yo la seguía observando cómo se iba “apagando” pero no estaba a mi alcance hacer mayor cosa… Debo confesar que me veía perfectamente reflejado en ella… tal vez por mi edad, por mi precaria situación de salud y por mi descuidado aseo personal… sin poder hacer nada para solucionar tampoco mi propia situación… muy patético pero cierto. Muy sutilmente traté de insistir en el punto de que veía indispuesta a Laika sin conseguir nada… Me di cuenta que ya no escuchaba sus ladridos nocturnos, en el día la veía echadita en un lugar que no era el acostumbrado por ella, ahora se echaba debajo de la mesa en la cocina, me di cuenta que habían cambiado el lugar de los platos de la comida pero no quise preguntar la razón del cambio… Con mucho dolor decidí no dejarla entrar más a la habitación donde duermo pues me di cuenta que la cama estaba llena de garrapatas; en una sola noche, cuando aún Laika entraba a dormir, pude recolectar más de treinta garrapatas en un envase sin contar las que tuve que aplastar en el piso, como cucarachas, con el respectivo registro de sangre como evidencia que le mostré a Vanessa al día siguiente, e incluso conseguí varias en mi cuerpo y aún hoy día me las sigo encontrando por todos lados, pues el mueble donde dormía Laika está full de garrapatas y por imposición de Vanessa no permitió que lo sacara de la habitación y debí seguirme exponiendo a semejante plaga de garrapatas. Gracias a Dios que hoy Gretty decidió sacarlo de la habitación donde duermo para limpiarlo con el veneno que usaban para Laika, no obstante ya se habían diseminado por todo el cuarto y me quedarán como recuerdo de mi querida Laika.


Los últimos días antes de morir Laika fueron muy dolorosos para mí, pues vi como desapareció aquella perrita ágil y alegre, muy despierta y consentida, para transformarse en una tambaleante ancianita que a duras penas podía caminar… se pasaba la mayor parte del día postrada en la cocina, perdió por completo su gran apetito, podía ver como sus heces evidenciaban una sostenida diarrea por varios días… hace dos días, el lunes, la vi como caminaba con gran dificultad sin ningún dominio de los cuartos traseros, los cuales casi arrastraba con gran esfuerzo. Esa noche decidí estar pendiente toda la noche de ella para ayudar a hidratarla sin que se tuviese que mover desde donde estaba echadita; pude ver como respiraba con dificultad y como se le aceleraba abruptamente el ritmo de su respiración, allí me di cuenta que estaba sumamente grave. Al día siguiente, martes 23, Vanessa se la llevó al veterinario y luego de recorrer varios lugares sin conseguir quién se la atendiera regresó con su perrita en brazos, lo cual me produjo un gran dolor tanto por Laikita como por Vanessa al ver el esfuerzo que estaba haciendo mi hijita para salvar a su perrita sin conseguir ningún resultado positivo… que frustración tan grande y yo sin dinero y sin fuerzas para poder colaborar de manera más activa. Solo me quedó encerrarme a llorar de indignación en el cuarto, sintiendo una gran impotencia y pensando como este país se nos fue a la mierda.


Estuve averiguando por internet como preparar un suero casero para hidratar a Laika pero no teníamos los ingredientes necesarios, otra vez las limitaciones económicas y de aprovisionamiento nos indicaban que estamos impotentes ante estas situaciones… que vaina tan arrecha sentir que a un ser querido se le va la vida y no podemos hacer mayor cosa por ayudarle… Ese ha sido el drama de cientos y miles de venezolanos durante esta terrible crisis que estamos padeciendo y sufriendo la gran mayoría de ciudadanos y que los delincuentes que nos gobiernan se empeñan en desmentir y negar… Basta Ya no joda! Luego un amigo de Gretty les trajo un gatorade y un suero, el cual le fue administrado de inmediato, aunque después se dieron cuenta que el suero era para administración parenteral, pero ya había tomado cierta cantidad con una aparente leve mejoría según la opinión de Vanessa. Esa noche, de martes para miércoles seguí la misma rutina y esperé que Vanessa terminara su “guardia” para seguir yo cuidando a Laika;  cerca de la 03:30 am encontré a Laika en el piso, se había bajado del mueble donde estaba para ir a defecar, pero solo logró arrastrarse un metro y allí estaba tumbada de lado, respirando con dificultad y defecada, por un momento dudé en llamar a Vanessa pero luego decidí que dada la delicada situación era mejor avisarle. Así procedí a llamarla a lo cual respondió de manera alarmada y traté de calmarla, luego se acercó y recogió la Laika del piso, mientras estaba en los brazos de Vanessa le hablé a Laika para ver como reaccionaba y me dirigió una mirada que lo decía todo… abrió sus ojitos negros y redondos, los tenía humedecidos, vidriosos… me miró fijamente por unos segundos y sentí que se estaba despidiendo, que simplemente se estaba muriendo y ella lo sabía… sentí que me decía “bueno viejo nos vemos en el otro lado, yo me voy primero, allá te espero”… pude ver a la muerte en esa fría mirada que en otros momentos había resultado tan tierna y conmovedora… sentí un gran dolor pero traté de no demostrarle nada a Vanessa, quién se quedó limpiando a Laika y recogiendo el líquido que defecó; yo me vine al cuarto y debo haberme quedado dormitando cerca de las cinco de la mañana. A las 06:00 am escuché sonar el teléfono de la casa y no me atreví a salir hasta que no escuchara que ya estaba alguien afuera, tenía todavía la mirada de Laika en mi mente y trataba de prepararme para cualquier eventualidad. Al rato escuché hablar a Vanessa y a Gretty con Laika, me parecía escuchar unos pequeños quejidos pero no estaba seguro si eran los gatos desde su cuarto o si simplemente eran ideas mías y de pronto escuché un grito desgarrador y el llanto desconsolado de Vanessa… comprendí que Laika había muerto y solo me atreví a asomar mi cabeza desde la puerta del cuarto y respetar el momento de intenso dolor que estaban viviendo Vanessa y Gretty sus familiares más cercanos… me quedé congelado donde me encontraba mirando mientras las lágrimas empañaban mis ojos…


Traté de pensar que Laika había descansado y que al menos no había tenido una larga y penosa agonía y sufrimiento. Pero igual el dolor estaba a flor de piel y el llanto inconsolable de mi hijita y sus gritos de dolor no hacían más que incrementar mi gran pesar…

En el transcurso de esa triste mañana se procedió a enterrar a Laika en el patio trasero de la casa, siguiendo así un ritual que establecieron aquí como costumbre con todas sus mascotas fallecidas, así que allí reposará su cuerpecito junto a: Daisy, La Niña, Micky, Triny, Laika I. Su cuerpo fue envuelto en sábanas y en un cubrecamas que perteneció a mi Mamá y que para mí tenía un significado y un valor muy especial, pero así lo decidió Vanessa y no me pareció prudente ni quise hacer ningún comentario en ese momento de tanto dolor para ella y para todos nosotros.


Laika había ganado sus Alas y ahora el Ángel de cuatro patitas iba camino al cielo.

HASTA SIEMPRE  LAIKA CHULINA, MI CHULA QUERIDA… GRACIAS POR TU FIEL COMPAÑÍA MI VIEJITA QUERIDA. 



OBITUARIO QUE LE DEDICÓ VANESSA A LAIKA EN SU FACEBOOK

LAICKA CHULINA como te llamábamos "La Chula" la que se ganó el Amor de todos nosotros durante estos 14 años que nos acompañaste fielmente, para quién compuse canciones desde el fondo de mi corazón, canciones llenas de Amor para ti: "chulería chulería más te quiero cada día y es que vivo enamorada desde que te vi... "
"Laicka Chulina Torres Hernández es mi perrita ra ra ra la que más quiero, la que más amo es mi perrita ra ra ra"
Más que una mascota eras un miembro más de la familia... una parte muy importante de nuestra vida se ha marchado hoy 24 de enero, coincidiendo con el cumpleaños de mi abuela Aída y un día antes de mi cumple... cosas del destino o designios de Dios...
Ya no será igual al llegar a mi casita... cuanto extrañaremos tu manera de recibirnos moviendo tu colita y girando alrededor con tus ojitos llenos de Amor, como si hubieses estado mucho tiempo sin nosotros.
Mi hija cuadrúpeda <3 Mi Moñi Moñi <3 
Siempre te amaremos y recordaremos <3


  

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Mil Gracias por su visita en SER+POSITIVO y por dejar su comentario. Esperamos seguir disfrutando de sus visitas.
Un abrazo de luz y muchas bendiciones.
Namasté