La Soledad

DISFRUTANDO LA SOLEDAD

por  Azalea Esquerre

La palabra soledad siempre ha sido asociada con tristeza, abandono; incluso en el diccionario el significado es: aislamiento o confinamiento, falta de contacto con otras personas. Cruel vacío de puntos suspensivos que podemos mejor transformar en signos de exclamación, interrogantes con respuestas, punto y aparte como cierre de ciclo, una coma para continuar la historia o simplemente tres puntos seguidos uno del otro pero sin suspenso.
Sólo la depresión puede hacer que estando rodeados por muchas personas, estemos realmente solos, apartados. Quienes disfrutan la soledad, prefieren llamarla privacidad. La soledad no es más que un estado de ánimo.
Los seres humanos estamos hechos para adaptarnos, disfrutar de la buena compañía de otras personas o en compañía de nosotros mismos. Estar a solas puede ser refrescante, los instantes de soledad sirven para pensar, reflexionar, disfrutar de nuestros pensamientos, ideas e incluso de nuestra intimidad. Un espacio para conocernos mejor.

Somos una diversidad perfecta por nuestras imperfecciones y diferencias, a quienes no toleran la soledad se les dificulta entender cómo pueden otros disfrutarla, cómo se puede saborear. Desprenderse de las etiquetas y desconectarse del mundo, hacer un espacio para compartir a solas con tu sombra, es un descanso a las máscaras, y una bienvenida a las emociones esparramadas sin prejuicios ni fronteras.

Estar a solas es pararse frente al espejo y entender el reflejo, es tomar el control del control remoto, es decidir sin preguntar, es escucharte y darte prioridad.
Los monjes ven la soledad como fuente de iluminación espiritual.
A mi me sirve como fuente de inspiración y concentración, mis espacios, mis momentos, son perfectos para escribir, drenar con las teclas, apuntar emociones y permitirme ser frágil, dejarme empañar los ojos, tal vez dejarlos llorar o cerrarse de risa.
La capacidad de abstracción también te puede llevar a deliciosos momentos de soledad mental, viajar a rincones propios aún estando en compañía de miles de personas y lograr distraer las curiosidades humanas escondiéndote en tus propios pensamientos.
Respeto la teoría de la humanidad en colectivo y disfruto de la buena compañía, mi familia resulta ser siempre la mejor opción, una inyección de amor, mis amigos son un intensivo de energía, y compartir en pareja devuelve el equilibrio que el día a día resta,  pero llegado el momento, escaparme conmigo es el mejor resultado de una conciencia equilibrada y en paz, es una muestra de autoconfianza, prepararme desde adentro para dar lo mejor de mi a quienes me motivan, llenan mi corazón de pasiones y dan forma de historia a mis palabras.


FUENTE: http://184.106.119.52/disfrutando-la-soledad.html

En http://www.inspirulina.com/