Para notar si te has dejado atrapar por el tiempo psicológico,puedes usar un criterio muy simple.
PREGÚNTATE: ¿Hay alegría, fluidez y ligereza en lo que estoy haciendo? Si no la hay, es que el tiempo encubre el momento presente y percibes la vida como una carga o como un esfuerzo.
Si no hay alegría, fluidez o ligereza en lo que haces, eso no significa necesariamente que tengas que cambiar lo que haces. A veces, simplemente, basta con cambiar la manera de hacerlo.
El «cómo» siempre es más importante que el «qué». Trata de conceder mucha más atención a lo que haces que al resultado que esperas obtener...