El VIH se puede encontrar en la sangre, el semen, el líquido pre-seminal, los fluidos vaginales y leche materna de una persona que tiene el virus. La transmisión se produce cuando el VIH contenido en estos fluidos entra en el torrente sanguíneo de una persona que no tiene el virus. Existen tres vías mediante las cuales podemos contraer el VIH:
1. Sexual
En Venezuela la mayoría de las nuevas infecciones por VIH ocurren a través de las relaciones sexuales.
Todas las relaciones sexuales con penetración —vaginal, anal— sin el uso adecuado del preservativo, u orales en las que se trague fluido, pueden ponernos en riesgo de contraer el VIH. El tipo de relación sexual de más alto riesgo, el de penetración anal sin protección; sigue en riesgo el de penetración vaginal sin protección; y, por último, practicar sexo oral tragando fluidos —secreciones vaginales, semen o líquido pre-eyaculatorio.
Las relaciones sexuales anales sin protección implican riesgo porque en la mucosa anal pueden producirse fácilmente microfisuras o heridas que facilitan la entrada del VIH al torrente sanguíneo. Cuando una pareja, heterosexual u homosexual, tiene relaciones sexuales anales, ambos miembros de la pareja corren el riesgo de contraer el VIH, tanto la persona receptiva como la que penetra.
El coito vaginal sin preservativo también implica riesgo. En este tipo de relación sexual, es más fácil que el hombre le transmita el VIH a la mujer que la mujer al hombre. Esto se debe, entre otras razones, a que el semen permanece mayor tiempo en la vagina y como en el tejido de ésta hay células que tienen ramificaciones, les permite "absorber" el virus más fácilmente. Esto no quiere decir que la trasmisión de la mujer al hombre no pueda ocurrir.
El sexo oral de contacto boca—pene implica riesgo, sobre todo si se recibe semen en la boca y se tienen heridas en las mucosas, producidas por problemas bucales, en las encías, dentales, brackets (aparatos dentales) y piercings.
El sexo oral de contacto boca—vagina también supone riesgo, sobre todo si se tragan las secreciones vaginales y se tienen heridas en las mucosas, como las mencionadas arriba.
2. Sanguínea
a. Al compartir agujas:
Compartir jeringas sin esterilizarlas previamente, para inyectarse drogas, esteroides, vitaminas o productos estéticos, implica un alto riesgo, debido a la posibilidad de intercambio de sangre con VIH, como sucede si nos realizamos tatuajes o piercings con agujas no esterilizadas.
b. Transfusiones sanguíneas (cada vez menos frecuentes)
Actualmente todos los bancos de sangre deben realizar la prueba de anticuerpos a las muestras. Sin embargo, aunque cada vez menos factible, aún existe riesgo de transmisión por esta vía.
c. Accidentes laborales
Personas que laboran en el área de la salud, médicos y enfermeras, han contraído el VIH accidentalmente al manipular agujas que contienen sangre con VIH o cuando el virus ha entrado a su torrente sanguíneo a través de una cortada.
3. De una mujer con VIH a su bebé – “Transmisión vertical”
Implica la transmisión del VIH de una madre que tiene el virus a su bebé, durante el embarazo, el parto o a través de la leche materna, durante la lactancia.
6 de Marzo de 2014
Fuente: http://www.jovenesyvih.org
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Namasté