LA EUTANASIA Y EL SUICIDIO
DIFERENCIAS o DISTINTOS CRITERIOS:
SOCIALES, MORALES y / o LEGALES . . .
Después de ver un capítulo de la serie “Private Practice” donde se tocaba este tema de la eutanasia / suicidio, recreado en la representación de un par de amigas, una médico y otra con una enfermedad degenerativa conocida como Enfermedad de Huntington – antes conocido: “mal de San-Vito”( o corea de Huntington –por movimientos coriacéos, involuntarios pues…) quién toma la decisión de “adelantar” su muerte: Suicidio-Eutanasia ?? !!!!!!! quién lo dice??? para no sufrir mientras se va deteriorando su condición física y mental, proceso que ya vivió con su madre, quién sufrió y murió con la misma patología . . . pero a diferencia de su madre, ella argumenta que no tiene a nadie que la ayude a transitar ese “caminito” y prefiere morir cuando aún se puede valer por sí misma . . .
La paciente está regresando de un viaje por Italia, a donde se fue a disfrutar de unas últimas “vacaciones” antes de tomar su fatídica decisión de terminar con su vida.
Para lo cual solicita la ayuda incondicional (y extraoficial) de su amiga médico para consumar la drástica decisión.
No sé cómo hizo para convencerla o bajo qué argumentos logró que colabore con ella, pero la doctora accede a hacerlo . . . e incluso se lo comenta a unos colegas, para consultarle a uno de ellos, como fue su participación en un acto de eutanasia de un paciente de más de 70 años, a quien asistió y le suministró morfina para “ponerlo” a dormir ...
pero este médico le insiste a la doctora que no lo haga, que no tiene idea de lo duro que es ver como muere una persona inducida farmacológicamente por ti de manera “profesional”, aunque el paciente así lo deseara (y quizás también el médico tratante piense que sea la mejor opción de su paciente, morir y dejar de sufrir . . . ) pareciera que nadie está preparado para enfrentar esa “transición” o ese paso al más allá, incluso le comenta el doctor a su colega que su paciente pareció arrepentirse en el último momento, aun habiéndole consultado en repetidas oportunidades, sobre su consentimiento para seguir suministrándole el “coctél” para “dormir” (Benzodeazepina + barbitúrico + Cloruro de Potasio (KCl) y como casi al final del “proceso” se plantea una lucha entre la vida y la muerte, entre el aire y la asfixia, entre la luz y la eterna oscuridad, parece que no es fácil el tránsito de plano . . . incluso él doctor llega a comentarle que ese episodio le cambió la vida y que no ha podido olvidar esos últimos momentos de su paciente, que esos instantes lo acompañan constantemente, dejándole ver su desasosiego o “arrepentimiento” por haberle colaborado a su anciano paciente desausiado a “dar ese paso”, le insiste vehementemente que no lo haga, que su amiga es una mujer joven, que esa decisión para “ayudar” a su amiga se puede transformar en su propia “némesis” y que podrá destruir su carrera y su vida …
pero este médico le insiste a la doctora que no lo haga, que no tiene idea de lo duro que es ver como muere una persona inducida farmacológicamente por ti de manera “profesional”, aunque el paciente así lo deseara (y quizás también el médico tratante piense que sea la mejor opción de su paciente, morir y dejar de sufrir . . . ) pareciera que nadie está preparado para enfrentar esa “transición” o ese paso al más allá, incluso le comenta el doctor a su colega que su paciente pareció arrepentirse en el último momento, aun habiéndole consultado en repetidas oportunidades, sobre su consentimiento para seguir suministrándole el “coctél” para “dormir” (Benzodeazepina + barbitúrico + Cloruro de Potasio (KCl) y como casi al final del “proceso” se plantea una lucha entre la vida y la muerte, entre el aire y la asfixia, entre la luz y la eterna oscuridad, parece que no es fácil el tránsito de plano . . . incluso él doctor llega a comentarle que ese episodio le cambió la vida y que no ha podido olvidar esos últimos momentos de su paciente, que esos instantes lo acompañan constantemente, dejándole ver su desasosiego o “arrepentimiento” por haberle colaborado a su anciano paciente desausiado a “dar ese paso”, le insiste vehementemente que no lo haga, que su amiga es una mujer joven, que esa decisión para “ayudar” a su amiga se puede transformar en su propia “némesis” y que podrá destruir su carrera y su vida …
Así van transcurriendo los acontecimientos, entrelazados con otros casos de la serie, pero yo no pude salirme del caso planteado por estas amigas . . .
La doctora Amiga de la paciente, tiene sus conflictos existenciales propios de cada quién, además también comienza a tener sus “dudas” en la opción que eligió de ayudar a su amiga y evitar que sufra . . .
Como probablemente algunos que me leen, pudieron ver el capítulo que comento, trataré de no extenderme demasiado en los detalles, solo resumiré que llegado el día para “consumar” el acto (no sabemos todavía si de Eutanasia o Suicidio!!!!),
llega la dra. con su maletín y sus instrumentos (jeringas y medicamentos) y mientras conversa con su Amiga, le Re-pregunta si está segura del paso que va a dar, a lo que la paciente le responde que sí, mientras se acomoda en el sofá para recibir su “coctel”, también arreglan un “supuesto” escenario con un frasco de pastillas para simular un suicidio y así evitar implicaciones legales sobre la médico-amiga por practicar la eutanasia . . . todo un TRABALENGUAS MENTAL para mí . . . pero sigamos:
en el momento que comienza con la primera dosis del coctél, el tranquilizante o Benzodeazepina, la paciente sufre una reacción y al comenzar a sentirse asfixiada comienza a pedirle AUXILIO a su amiga doctora y ésta en principio y quizás recordando lo comentado por su colega, le explica que esa es una reacción “normal” y que seguirá con la otra dosis, pero la paciente visiblemente desesperada y alterada, por la falta de aire o por no desear morir . . . continúa gesticulando a lo que la dra. le pregunta si lo debe tomar como que no desea continuar y suspende su “procedimiento” y llama de inmediato al 911 de emergencias para que envíen una ambulancia a socorrer a su amiga.
llega la dra. con su maletín y sus instrumentos (jeringas y medicamentos) y mientras conversa con su Amiga, le Re-pregunta si está segura del paso que va a dar, a lo que la paciente le responde que sí, mientras se acomoda en el sofá para recibir su “coctel”, también arreglan un “supuesto” escenario con un frasco de pastillas para simular un suicidio y así evitar implicaciones legales sobre la médico-amiga por practicar la eutanasia . . . todo un TRABALENGUAS MENTAL para mí . . . pero sigamos:
en el momento que comienza con la primera dosis del coctél, el tranquilizante o Benzodeazepina, la paciente sufre una reacción y al comenzar a sentirse asfixiada comienza a pedirle AUXILIO a su amiga doctora y ésta en principio y quizás recordando lo comentado por su colega, le explica que esa es una reacción “normal” y que seguirá con la otra dosis, pero la paciente visiblemente desesperada y alterada, por la falta de aire o por no desear morir . . . continúa gesticulando a lo que la dra. le pregunta si lo debe tomar como que no desea continuar y suspende su “procedimiento” y llama de inmediato al 911 de emergencias para que envíen una ambulancia a socorrer a su amiga.
La ambulancia llega, luego se ve a la dra. conversando con un detective de la policía, explicándole la condición de su amiga y que eso la hizo tomar esa fatídica decisión de “suicidarse” . . . por unos momentos nos dejan en suspenso sobre el desenlace de la paciente, pero su amiga, la colaboradora, la doctora, se va de la clínica y da por sentado que su amiga va a morir y se encierra en su casa y se refugia en el alcohol y drogas legales (tranquilizantes, antidepresivos, estimulantes . . .) o sea, esa es su propia cruz (remember conflictos existenciales de cada quién en particular) . . . y así trata de ahogar su pena y remordimiento ( o arrepentimiento??) por lo que hizo tratando de ayudar a su amiga . . .
Bueno para hacer un cuento largo en uno (no tan) corto, les cuento que la paciente logra salvarse y al darle de alta su amiga médico le ofrece que sea su room-mate y que así pueden ayudarse mutuamente, pues ya no hay secretos entre “los demonios” de ambas… y así lo hacen, se mudan juntas para “salir adelante” . . .
Luego viene la escena de la doctora llegando un viernes a casa con unas cuantas películas para compartir con su amiga, mientras la llama animadamente informándole de los planes de compartir unas pelis, la sigue buscando por toda la casa hasta encontrarla sin vida en su habitación, sobre la cama y con un frasco de pastillas a su lado, pero esta vez si definitivamente muerta . . .
Bueno es aquí donde comienza mi reflexión y disertación en monólogo sobre este tema que deja “mucha tela que cortar” como dirían nuestras abuelitas… o mucho tema para “divariar” como decía un conocido bohemio pueblerino cuando comenzaba a disertar sobre algún tema después de haberse tomado unas cuantas politas o birritas o tal vez algo más estimulante… él decía: “bueno ahora vamos a “divariar” sobre tal o cual tema . . . aquí es donde yo digo de que vamos entonces en este tema TABU de la eutanasia o suicidio asistido y consentido por algunas legislaciones . . .
Sobre este tema tan polémico pude ver una excelente película canadiense o una producción Franco-Canadiense, ganadora de varios premios en diferentes festivales, Cannes, Toronto, e incluso un Oscar como película extranjera, donde se trata este tema, pero en un mundo de cultura, relaciones de pareja, amistad, afectos perdidos, sistemas hospitalarios, afectos retomados, drogadicción, significado de la vida…
Una verdadera Obra Maestra “Las Invasiones Bárbaras” un film de DENNYS ARCAND del año 2003, que no tiene ningún desperdicio, de excelente calidad interpretativa, y una temática muy interesante.
Pueden conseguir más información sobre Las Invasiones Bárbaras en el siguiente Link:
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Mil Gracias por su visita en SER+POSITIVO y por dejar su comentario. Esperamos seguir disfrutando de sus visitas.
Un abrazo de luz y muchas bendiciones.
Namasté